Ideas para reciclar la ropa de tu bebé
Sin duda alguna, la llegada de un bebé al hogar es uno de los momentos más especiales que existen. Sin embargo, dicha magia viene también acompañada de meses frenéticos en los que nuestro bebé requiere de toda nuestra atención y esfuerzo. Inevitablemente, y en tan solo un cerrar de ojos, te estarás haciendo la siguiente pregunta: ¿Qúe hacer con toda esa ropa que se quedó pequeña e inutilizable? Si te ha llegado ese momento, he aquí algunas opciones y consejos que te ayudarán a reciclar la ropa de tu bebé de manera efectiva.
Vende online y gana algo de dinero
¿Qué mejor uso que vender la ropa de tu bebé y de paso llevarte un poco de dinero por ello? Seguro que en cientos de casas les vendrá muy bien adquirir esa ropita a un precio muy económico sobre todo porque las prendas de bebé no solo son caras sino que su uso es efímero. Si quieres optar por esta opción, en páginas web de anuncios locales como ésta puedes vender esa ropa que ya no necesitas desde la comodidad de tu casa. Acuérdate siempre que las prendas estén muy limpias y en buenas condiciones, y no te olvides de poner un anuncio atractivo y en línea con lo que estás vendiendo.
Realiza un intercambio
Puedes organizar un encuentro con amigas, con vecinas de la zona o incluso poniendo carteles cerca de tu casa ofreciendo la ropa a cambio de algún otro objeto o incluso cambiándola por ropa de más tamaño que le pueda servir a tu ya más grandecito bebé. Se trata, además, de una buena forma de reforzar ciertos lazos sociales dentro de tu comunidad.
Alimenta tu espíritu dando a quienes necesitan
Esta es, sin duda alguna, la mejor opción que podemos tomar si queremos sentirnos bien con nosotros mismos y con el mundo que nos rodea. Para ello, basta que regales la ropa a asociaciones de beneficencia, a la iglesia o directamente a familias humildes que conozcas y que sepas que pueden necesitar esa ropa. Se trata de un gesto de amor que muchas personas te agradecerán.
De hecho en estos meses, he estado organizando la misión “Un Regalo de Amor” por medio de la cual todo el que deseo donar y ayudar a los mas necesitados puede hacerlo simplemente comunicándose conmigo y enviando sus aportes. Si quieres unirte solo debes ir aquí.
Monta una venta de garaje o mercado casero
Montar un “mercado casero de lo usado”, lo que tanto se usa en Estados Unidos como garage sale, en tu propia casa o en el garaje es un modo veloz de reciclar la ropa de tu bebé. Este plan requiere de mayor preparación pero puedes unirte incluso a una amiga o vecina y organizarlo juntas. Deberás anunciarlo en las tiendas colindantes a tu casa, comunicárselo a la gente y fijar una fecha concreta en la que además de la ropa podrás aprovechar para exponer objetos que puede que sirvan a otras personas y venderlo a un precio mucho más económico que en el mercado.
Dale una nueva vida y usos a la ropa de tu bebé
Esta es la mejor opción para poner en juego toda tu creatividad sobre todo en una época bastante marcada por la popularidad de las manualidades DIY. Puedes usar las prendas de tu bebé para diversos propósitos como, por ejemplo, realizar manteles o una divertida colcha. Inclusive, sobre todo si tienes una niña, puedes usar la ropa que ya no le sirva como cambio para algunas de las muñecas que tiene o tendrá.
Una idea ejemplar fue la de Project Repat donde realizan frazadas y sabanas a partir de Tshirts viejos y usados. El fin es crear algo nuevo, útil y que quede de recuerdo por mucho tiempo más.
Lógicamente, si se trata de tu primer bebé y tienes la intención de tener más hijos, siempre puedes optar por almacenar las mejores prendas para el bebé que esperas tener en el futuro. Si decides hacerlo, te aconsejamos que guardes muy bien la ropa para que no esté a la mano del polvo o de insectos que puedan terminar por destruirla. Igualmente puedes siempre quedarte con alguna prenda de tu bebé como recuerdo o como algo significativo para enseñarle cuando crezca.
Como puedes ver, existen muchas opciones para reciclar la ropa de tu bebé. En el mejor de los casos, puedes ganar algo de dinero haciéndolo o simplemente sentir la enorme satisfacción de dar esas prendas a aquellas personas que más las necesitan. De un modo u otro, harás feliz a alguien y muy feliz al medio ambiente.
Post escrito por: Maria Rodriguez en Colaboración especial