5 magníficos consejos para ayudar a tu bebé a dormir
Uno de los mayores retos a los que nos enfrentamos los padres, no importa si somos primerizos o experimentados, tiene que ver con el sueño de los bebés, cómo facilitar su proceso de adaptación y cómo crear rutinas de sueño efectivas para ayudarles a dormir tranquilamente durante la noche.
Contribuir a que tu hijo establezca rutinas y horarios de sueño requerirá mucha disposición y paciencia de parte de los padres.
Es necesario comenzar lo antes posible con una rutina para antes de llevar a tu bebé a la cama, una vez que este comience a diferenciar el día de la noche y que comience a dormir por más tiempo durante la noche. Este proceso se da generalmente entre las primeras 6 semanas y los 3 meses de vida.
Aquí te van los consejos que apliqué y que aún sigo llevando a cabo para que me hijo duerma mucho y durante la noche completa.
1. Acuesta a tu bebé a la misma hora todos los días y sobretodo en las noches.
Esta técnica ha sido mi tabla de salvación pues me ha permitido organizarme, eficientizar los tiempos, descansar y sobretodo, que mi bebé se sienta atendido y tranquilo a la hora de dormir.
2. Procura que el ambiente en donde el bebé duerma sea lo más tranquilo posible.
Desde la panza mi niño fue muy sensible a los ruidos, tanto así que la música lo alteraba y yo sentía que no le gustaban los ambientes muy ruidosos. ¡Cosas de madres! :p Cuando nació y comenzamos a conocernos, me dí cuenta que los ruidos seguían causándole mucha molestia, no podía colocarlo en lugares ruidosos para dormir porque no dormía o se despertaba casi instantáneamente.
Casi no salía a la calle con él, a menos que fuera estrictamente necesario porque si por cosas de la vida nos pasaba un vehículo o un motor cerca se asustaba. Sabía que esto era cuestión de tiempo, pero preferí exponerlo poco a poco, a su ritmo, hasta que fue perdiendo ese miedo y el susto. Lo mismo pasó con el sueño.
Hasta los 11 meses durmió en nuestra habitación y cuando iba a dormir tenía que cerrar la puerta y ventana para que durmiera las horas reglamentarias. En sus horas de siesta, no permitía que nadie interrumpiera su sueño y quienes venían a visitarlo debían volver en otra ocasión o esperar que despertara.
3. Procura que la habitación no tenga televisor, ni luces directas y que tenga poco tráfico.
Es recomendable que el cuarto del bebé no haya televisor ni ningún artefacto ruidoso o de distracción encendida cuando sea su hora de dormir. Las luces deben ser tenues y no se debe transitar por la habitación a fin de evitar alterar sus patrones de sueño.
En cuanto a las luces, obté por colocar unas luces de pared con aplique de estrella y media luna en colores amarillo y azul que compré en Ikea. Fueron un éxito para combinar con la decoración del cuarto del bebé.
4. Arrullarlo, silbarle y cantarle son excelentes opciones para calmarlo.
Algo que me funcionó desde siempre para calmar a mi bebé y dormirlo sin problemas, fue arrullarlo, darle palmaditas en la nalguita, silbarle y cantarle.
Creo que cada madre o padre trae un chip integrado que le permite identificar lo que le gusta o lo que no le gusta, lo que funciona o lo que no funciona, con nuestros hijos. Cuando necesitaba dormirlo y mi bebé pedía mi presencia me quedaba con él hasta que entraba en el sueño profundo, le cantaba suavecito o le silbaba. Esta técnica aun me sigue funcionando y ya tiene un año y 5 meses.
El truco está en ir probando de manera paulatina las diferentes técnicas para así determinar cuales son las más eficaces.
5. Coloca a tu bebé en su cuna o corral en estado somnoliento.
Al colocar a tu bebé en su cuna o corral en estado somnoliento, pero aún despierto, estarás contribuyendo a que este aprenda a dormir solo. Los bebés que desarrollan esta habilidad tienen mayor facilidad de dormirse cuando despiertan en la noche.
A mi peque nunca le gustó mucho que lo tuvieran por mucho tiempo cargado, por lo que cuando tenía sueño y lo colocaba en su corral, se dormía prácticamente de inmediato y solo.
Otras técnicas recomendadas
- Antes de dormir o tomar siestas, dale un baño con agua tibia (36º- 37º C). Esta es una excelente manera de ayudar a que tu bebé se relaje y se prepare para ir a la cama.
- Da suaves masajes a tu bebé con una crema humectante o un gel de masajes para reconfortarlo y prepararlo para la hora de dormir. Mis preferidos para esta labor son la crema corporal Hydra Bebé de Mustela y el Aceite de Masaje de Mustela. Ambos hidratan y suavizan la piel del bebé, la nutre y facilitan el masaje, sin contar que el aroma lo amo.
- Después del baño y el masaje, alista a tu bebé para ir a la cama, realizando actividades tranquilizantes.
- Prepara el ambiente con música suave y luz tenue. El tono de tu voz puede ayudarlo a sentir reconfortado y seguro.
- Puedes cantarle una canción, leerle o contarle un cuento. Incluso puedes orar con tu bebé. A mi me funciona excelente orar con mi bebé, además de que le voy enseñando a amar a Papá Dios.
¿Cuantas horas de sueño son las recomendadas para mi bebé?
Es bueno conocer las horas de sueño recomendadas por expertos para que nuestros bebés tengan un optimo crecimiento y estado de salud.
Recién nacidos: 10.5 a 18 horas de sueño. Patrón de sueño es irregular por lo que tendrá que despertarse cada 2 o tres horas a alimentarse.
Bebés de 2 a 12 meses: 14 a 14.5 horas de sueño. En esta etapa se produce un cambio en el sueño que le permitirá dormir más horas en la noche y varias siestas durante el día.
Niños pequeños de 12 a 36 meses: 13 a 14 horas de sueño. En esta etapa el niño sigue durmiendo más horas en la noche y las siestas durante el día se reducen.
¿Cuáles son los beneficios de un buen sueño?
- Un buen sueño estimula la hormona de crecimiento. Por eso oirás frecuentemente, que los niños que duermen mucho crecen más.
- Mejora el aprendizaje y la memoria.
- Contribuye a que los bebés estén más relajados y menos irritables.
- Fortalece las defensas del organismo.
- ¿Y qué hay para las mamitas? Cuando tu bebé duerme bien y las horas recomendadas, en rutinas establecidas, tú puedes dormir, descansar y organizarte mejor. Esto se traduce en un mejor estado de animo y mayor energía para nosotras.