[GUÍA GRATUITA] Decir sí a ti misma es más valiente de lo que crees

[GUÍA GRATUITA] Decir “sí” a ti misma es más valiente de lo que crees

“Lo quiero. Lo necesito. Pero algo me detiene…”

Si esto resuena contigo, primero que todo: respira profundo y reconoce tu valentía.

No estás sola.

Muchas mujeres —sobre todo mamás— llegan a ese punto en el que sienten que hay algo más para ellas. Un paso, un sueño, una inversión en su crecimiento. Y justo ahí… aparece el freno.

“No es el momento.”
“¿Y si no funciona?”
“Primero los demás, luego yo.”
“¿Y si me equivoco?”

Lo entendemos. Ese miedo es real, profundo y humano.

Pero aquí viene una verdad poderosa:

Decirte “sí” a ti misma es uno de los actos más valientes y transformadores que puedes hacer.

No solo es cuestión de dinero, tiempo o energía. Es cuestión de identidad. Es atreverte a querer más. A confiar en ti antes de ver los resultados. A mirar a tu yo futura y decirle: “Sí, voy hacia allá, aunque no tenga todo resuelto todavía.”

💥 Lo que realmente hay detrás de ese “no ahora”

A lo largo de nuestra experiencia acompañando a mujeres valientes como tú, hemos identificado 5 bloqueos comunes que suelen aparecer justo antes del gran salto. Y no, no tienen que ver con falta de capacidad… sino con creencias que aprendimos (y podemos desaprender).

Los 5 bloqueos más comunes son:

  1. “Necesito consultar con mi pareja”
    (Y en el fondo, el miedo a decidir por ti misma).
  2. “No es el momento perfecto”
    (Spoiler: el momento perfecto no existe).
  3. “¿Y si no vale la inversión?”
    (¿Y si sí lo vale… y cambias tu vida?).
  4. “Me da miedo ser más visible”
    (Porque brillar a veces da más miedo que fracasar).
  5. “Me siento culpable por gastar en mí”
    (Como si tu bienestar fuera un lujo, y no una base).

🌱 ¿Qué pasaría si hoy eliges creer en ti, antes de tener garantías?

Lo que proponemos no es ignorar el miedo, sino atravesarlo con conciencia y compasión. No estás equivocada por tener dudas. Solo necesitas nuevas herramientas para escucharte mejor y avanzar con claridad.

Por eso hemos creado un recurso especial para ti:

📥 Guía gratuita: “Cómo decirte SÍ sin culpa ni miedo”

Una hoja de ruta para ayudarte a identificar estos bloqueos, y acompañarte a través de ellos con amor, claridad y acción.

Dentro encontrarás:

  • Micro ejercicios de coaching para ti

  • Cambios de mentalidad centrados en madres reales y auténticas como tu

  • Reflexiones poderosas para expandir tu potencial

Este momento no es solo una decisión.

  • Es un nuevo pacto contigo misma.
  • Es el inicio de un camino donde tu crecimiento no es negociable.
  • Donde invertir en ti no es un gasto, es un acto sagrado.
  • Y donde enseñar a tus hijos que sí se puede, empieza por tu propio ejemplo.

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Deja de decirte esto si quieres más abundancia en tu negocio (y en tu vida) portada

Deja de decirte esto si quieres más abundancia en tu negocio (y en tu vida)

💬 ¿Te has dicho alguna vez una de estas frases?

  • “Si tuviera más dinero, podría invertir en mi negocio…”
  • “No tengo tiempo para aprender de finanzas.”
  • “Ganar más significa trabajar más duro.”
  • “Mejor dejo el dinero en el banco, invertir me da miedo.”

Si alguna de estas ideas ha pasado por tu mente (o por tu boca), respira profundo: no estás sola.

La mayoría de nosotras, sobre todo como mamás emprendedoras, hemos tenido conversaciones internas que nos limitan más de lo que creemos. Y no es que no seamos capaces, es que a veces estamos condicionadas por miedos, creencias heredadas o la simple inercia de la rutina.

🧠 Tu diálogo interno importa más de lo que imaginas

Lo que te dices todos los días sobre el dinero y el éxito es como una semilla. Si siembras dudas, miedos o resignación, eso es lo que va a florecer. Pero si cultivas confianza, apertura y visión… los frutos son totalmente distintos.

Tal vez hoy no lo sientes así. Tal vez sientes que estás esforzándote mucho, pero los resultados no llegan. O que el crecimiento está estancado. O que el dinero fluye… pero se va tan rápido como llega.

La buena noticia: puedes cambiar esa historia. Yo también estuve ahí.

🌟 ¿Y si el problema no eres tú, sino lo que crees?

Hay tres ideas poderosas que me ayudaron a salir del ciclo de frustración financiera y construir una relación distinta con el dinero:

1. Tu realidad externa refleja tu mundo interno

No se trata solo de números o estrategias, sino de lo que crees posible para ti. Cuando empiezas a identificar las creencias que te sabotean (como “ganar más es más sacrificio” o “yo no soy buena con el dinero”), puedes transformarlas en pensamientos más expansivos y constructivos.

2. No tienes que hacerlo sola

Una de las decisiones más transformadoras que tomé fue dejarme guiar. Contar con mentoría no solo te ahorra tiempo y errores, sino que te permite ver lo que no puedes ver sola. Rodearte de mujeres que ya caminaron ese camino puede ser el impulso que estás necesitando.

3. El esfuerzo debe convertirse en resultados reales

Ser mamá y emprender ya es de por sí una combinación valiente. Pero si ese esfuerzo no se está traduciendo en abundancia sostenible, tal vez es momento de revisar desde dónde lo estás construyendo. ¿Desde la escasez? ¿Desde la comparación? ¿Desde el miedo?

💥 Es hora de cambiar la conversación

Tú no necesitas más horas al día ni esperar a que cambien las circunstancias. Necesitas cambiar el guion que repites internamente. Y para eso, el primer paso es escucharte con honestidad.

¿Qué frase limitante necesitas dejar de decirte hoy?

Y si sientes que este es tu momento de dar el salto, busca herramientas, comunidad y mentoría que te acompañen a desbloquear todo lo que ya está dentro de ti.

Porque lo que mereces, mami, no es solo sobrevivir.

Es prosperar. 💖

El hábito de sentirnos ofendidos Lo que nos hiere son las expectativas

El hábito de sentirnos ofendidos | Lo que nos hiere son las expectativas

Las personas se pasan la mayor parte de su vida sintiéndose ofendidas por lo que alguien les hizo. La sorprendente revelación que te voy a hacer, va a cambiar tu vida… ¡Nadie te ha ofendido! Son tus expectativas de lo que esperabas de esas personas, las que te hieren…

Y las expectativas las creas tú con tus pensamientos. No son reales. Son imaginarias. Si tú esperabas que tus padres te dieran más amor y no te lo dieron, no tienes por qué sentirte ofendido.

Son tus expectativas de lo que un padre ideal debió hacer contigo, las que fueron violadas. Tus ideas son las que te lastiman.

Si esperabas que tu pareja reaccionara de tal o cual forma y no lo hizo… Tu pareja no te ha hecho nada. Es la diferencia entre las atenciones que esperabas tuviera contigo y las que realmente tuvo, las que te hieren. Nuevamente, eso está en tu imaginación.

[Tweet “Las personas son un río caudaloso. Cualquier intento de atraparlas te va a lastimar. Ámalas, disfrútalas y déjalas ir. #aninspiringmom #reflexionesdevida”]

¿Enojado con Dios? Son tus creencias de lo que debería hacer Dios, las que te lastiman. Dios jamás ofende ni daña a nadie. Un hábito requiere de todas sus partes para funcionar. Si pierde una, el hábito se desarma.

El hábito de sentirte ofendido por lo que te hacen otros (en realidad nadie te hace nada) desaparecerá cuando conozcas mejor la fuente de las “ofensas”.

Cuando nacemos, somos auténticos pero nuestra verdadera naturaleza, es suprimida y sustituida artificialmente por conceptos que nuestros padres, la sociedad y televisión nos enseñan. Y crean una novela falsa de cómo deberían ser las cosas en todos los aspectos de tu vida y de cómo deben actuar los demás.

Una de las mayores fuentes de ofensas es la de tratar de imponer el punto de vista de una persona a otra y guiar su vida. Cuando le dices lo que debe hacer y te dice “no”, creas resentimientos por partida doble.

  • Primero, te sientes ofendido porque no hizo lo que querías.
  • Segundo, la otra persona se ofende porque no la aceptaste como es. Y es un círculo vicioso. Todas las personas tienen el derecho divino de guiar su vida como les plazca. Aprenderán de sus errores por sí mismos. ¡Déjalos ser! nadie te pertenece.

❤️ Las personas son un río caudaloso. Cualquier intento de atraparlas te va a lastimar. Ámalas, disfrútalas y déjalas ir.

❤️ Entiende que nadie te ha ofendido. Son tus ideas acerca de cómo deberían actuar las personas y Dios, las que te hieren. Estas ideas son producto de una máscara social, que has aprendido desde tu infancia de forma inconsciente. Reconoce que la mayoría de las personas NUNCA va a cuadrar con esas ideas que tienes. Porque ellos tienen las suyas.

❤️ Deja a las personas Ser. Deja que guíen su vida como mejor les plazca. Es su responsabilidad. Dales consejos si te los piden, pero permite que tomen sus decisiones. Es su derecho divino por nacimiento: el libre albedrío y la libertad.

❤️ Nadie te pertenece. Ni tus padres, ni amigos ni parejas. Todos formamos parte del engranaje de la naturaleza. Deja fluir las cosas sin resistirte a ellas. Vive y deja vivir.

❤️ Deja de pensar demasiado. Ábrete a la posibilidad de nuevas experiencias. No utilices tu inventario. Abre los ojos y observa el fluir de la vida como es. Cuando limpias tu visión de lentes oscuros y te los quitas, el resultado es la limpieza de visión.

❤️ La perfección no existe. Ni el padre, amigo, pareja perfectos. Es un concepto creado por la mente humana que a un nivel intelectual puedes comprender, pero en la realidad NO EXISTE. Porque es un concepto imaginario. Un bosque perfecto serían puros árboles, Sol, no bichos… ¿existe? No. Para un pez, el mar perfecto sería aquel donde no hay depredadores ¿existe? No. Solo a un nivel intelectual. En la realidad JAMÁS VA A EXISTIR.

Naturalmente, al pez solo le queda disfrutar de la realidad. Cualquier frustración de que el mar no es como quiere que sea no tiene sentido. Deja de resistirte a que las personas no son como quieres o no piensan como tú. Acepta a las personas como el pez acepta al mar y ámalas como son.

❤️ Disfruta de la vida. La vida real es más hermosa y excitante que cualquier idea que tienes del mundo. Me complacerá decírtelo por experiencia.

El hábito de sentirnos ofendidos  Lo que nos hiere son las expectativas

❤️ Imagina a esa persona que te ofendió en el pasado. Imagínate que ambos están cómodamente sentados. Dile por qué te ofendió. Escucha su explicación amorosa de por qué lo hizo. Y perdónala. Si un ser querido ya no está en este mundo, utiliza esta dinámica para decirle lo que quieres. Escucha su respuesta. Y dile adiós. Te dará una enorme paz.

❤️ A la luz del corto período de vida que tenemos, solo tenemos tiempo para vivir, disfrutar y ser felices. Nuestra compañera la muerte en cualquier momento, de forma imprevista, nos puede tomar entre sus brazos. Es superfluo e inútil gastar el tiempo en pensar en las ofensas de otros. No puedes darte ese lujo.

❤️ Es natural pasar por un periodo de duelo al perdonar, deja que tu herida sane. Descárgate (no confundir con desquitarse) con alguien para dejar fluir el dolor. Vuelve a leer este artículo las veces necesarias y deja que los conceptos empiecen a sembrar semillas de consciencia en tu interior. Aprende con honestidad los errores que cometiste, prométete que no lo volverás a hacer y regresa a vivir la vida…

Marco Engelke